Más crónicas de Bahía Ballena. Pesca del camarón, huevas de dorado y el upe tico


Vuelvo a estar unos días sin acercarme por la computadora. No exactamente. Por aquí se ha corrido la voz de que con ellas hago milagros (para ellos, los habitantes de esta zona, los hago) y me están saliendo demasiados clientes, y la ultima ha sido la nieta de Betty, que me dice que la suya tiene un virus y que no le va, así que el por qué no me acercarme a su casa para ponérsela en orden. Me llego por allí y aquello no es un virus, es un laboratorio de esos que se encargan de hacer los de la fiebre porcina, aviar y demás bichitos (así los definió un ministro español) tan en boga. Veo que allí no puedo hacer nada, así que me la traigo, pensando en meterle un antivirus y actualizárselo, pero no acepta mi modem, así que termino por renovárselo cambiando los archivos dat del mío.
Leer el resto y ver algunas imágenesNo es para lo único que reclaman mis conocimientos de computadora e internet. Nelson ha estado dos veces a que le busque nombres de mujeres; la suya esta a punto de parir y están buscando uno original. La primera vez le imprimí un listado de un par de folios y la segunda suponiendo que la elección era complicada, al menos diez.


No acaba aquí la cosa. Williams, quiere que me meta en su cuenta de un banco de Estados Unidos porque dice que no sabe lo que esta pasando con su dinero que cada vez le ingresan menos. Lo convenzo de que si no tiene clave y demás no hay forma, pero eso no quita para que me pida un rojo (mil colones, o lo que es lo mismo 1,2 euros). Si no me lo saca no es feliz. Ayer fueron dos y el final es que acabo borracho perdido, durmiendo en la playa. Cuando esta bien bebido tira de tarjeta y al otro día no se acuerda, por lo que cuando va a pagar su alojamiento, él, lo único que sabe es que no tiene fondos para costearlo.
Hablando de los rojos que me ha pedido y que me ha prometido que me los devolverá. Tres son las mentiras del tico (son ellos las que las dicen, no se si orgullosos o riéndose de ellos mismos). Préstame dinero que mañana te lo devolveré, la puntita nada mas, y esta es el sarpe (ultima copa).


A Joan, aparte de haberlo dejado la mujer, también ha perdido el trabajo que tenía en la cooperativa. No se ha amilanado; una especie de fresquera (como las de llevar a la playa) en la parte trasera de su moto y a vender ceviche. Persona que ve andando o sentada para la moto y le ofrece su producto. Estaba promocionándolo en la puerta del Súper. Siempre me dije que la crisis no afectaría al personal en este país. Me admira la capacidad de supervivencia que tienen. Su imaginación para buscarse la vida es infinita.
Para los que no sepan lo que es el ceviche: En Costa Rica el plato incluye pescado marinado en , jugo de limón, sal, pimienta negra, cebollas finamente picadas, culantro y chiles finamente picados, ajo finamente picado. Se acostumbra servirlo en un plato con una hoja de lechuga o solo y galletas soda en el lado, como en México. Los condimentos populares son salsa de tomate y mayonesa o tabasco. El pescado típicamente es corvina, aunque el mahi-mahi o dorado, el tiburón, el marlin y la tilapia son populares. Así como los preparados de pulpo, ostras, mejillones, camarones o chuchecas entre otros mariscos, o la mezcla de todos los mariscos mencionados más camarones al cual se le llama vuelve a la vida.
Y ya que hablo de la venta ambulante, siempre, desde que estoy en este lugar, han pasado vendiendo sus productos, pero ahora es una verdadera invasión (supongo habrá llegado la crisis). Pasan con sus carros, normalmente un pick up, anunciando la mercancía por los parlantes y llamando la atención con una sirena tipo policía, pero no acaba aquí la promoción; varios de ellos no dejan de vocear al par del vehiculo, los mismos y sus precios, y no contentos, uno de ellos puerta por puerta pega un bocinazo de upe, forma que tienen de hacer salir a alguno de sus habitantes (algo así como ¡Ah de la casa!). Han sido muchas veces las que he preguntado de donde viene esta expresión y nadie ha sabido contestarme por lo que me he entretenido en averiguarlo.
La palabra “upe” proviene de emigrantes mexicanos que llegaron a Costa Rica a mediados del siglo XVIII. La virgen de los mexicanos es la de Guadalupe y se identificaban al encontrarse con sus coterráneos con ¡LUPE!.... pasando el tiempo esta expresión se extendió y quedo en upe…
Antes de irse a España a ver a su hija y de camino actualizar la visa, la canadiense había entablado amistad conmigo y después de su vuelta, la continua. Intercambiamos libros. Es cojonudo, que esta mujer sabe cuatro idiomas a nivel de lectura y si embargo aquí sobrevive de dar masajes en los hoteles. Me dice que va a dejar al negro (su compañero tico), porque ella ha intentado hacerlo mas responsable, pero que no hay forma. En eso le llevo ventaja: No fue mucho el tiempo que tarde en darme cuenta que lo peor que le puedes hacer a un tico es intentar hacerle ver que su forma de ver la vida no es la correcta.
En lo referente a separaciones. Leroy me dice que también se separó de la mujer.
Estaba solo viendo el atardecer y llega con su moto. Le pregunto:
¿Cómo es que no estas viendo el futbol? (Jugaba Costa rica en Uruguay)
Es que me espera mi novia
Vamos a ver, LeRoy, hace cuatro días que te separaste
Si, y al otro día ya tenia a mi novia. Una vieja; tiene sobre treinta años (aproximadamente será su edad)
Lo de separaciones y lo de los arrejuntamientos también se escapa a mis entendederas. Son muchas/os los que he visto por aquí. Tampoco veo que sea un trauma para los niños/as al menos de cierta edad.
Hacia tiempo que no pasaba tan asiduamente el carro de la policía. Los primeros días lo hacían con un solo foco (faro) funcionándole. Ya le funcionan los dos, pero ahora han dejado de hacerlo los pilotos de posición traseros. Si me creo al personal, esto lo hacen para pedirle a la gente para su reparación, ganándose algún dinero extra. Cierto o no, si es verdad que un día leí que la mitad de la flota de los vehículos de la policía de Puntarenas estaba fuera de servicio por falta de medios para su reparación. Siendo la causa la que fuere, mi gran pregunta es: ¿con qué moral pueden estos agentes decirles a alguien que están incumpliendo las leyes cuando ellos lo van haciendo?


Ya hace que amontonaron en la playa los palos que trae el río. Alguien dijo prendamos uno. Bonita fogata en medio de la oscuridad de la noche. Pensé en una buena sardinada pero por aquí ese bicho solo lo utilizan para carnada.



En el muelle veo llega una buena pesquera de dorado. Uno con un cuchillo le pega dos cortes, otro los arrastra hacia si, le mete las manos y los destripa, pero lo que me llama la atención es que nadie se entretiene en coger las huevas. Conozco al destripador y le digo que me de algunas. Aunque le hago perder un poco de su tiempo, lo hace.
Siempre he sido un negado para la cocina. Busco en internet su preparación. Diez minutos en agua en ebullición con unas cucharadas de vinagre para que no revienten y ya al acompañamiento no llego, pero puedo asegurar que con un chorreón de aceite de oliva [tuve que ir a comprarlo (por aquí es un lujo)] y un poco de sal y estaban riquísimas. Se lo digo a Verónica y contestación: ¡Que asco!



Ha llegado el camarón. Es por estas fechas cuando suele hacerlo. Con este son dos los años que he presenciado su llegada. Ya el año pasado estaban extrañados del poco que había venido, y este tampoco ha sido bueno. La causa no creo que sea el tipo de captura; mas artesanal no puede ser. Me hablan que cogían sacos y sacos y que al meter las piernas en el agua parecía estuvieras en agua hirviendo, tal era la cantidad que chocaban contra ellas. También del peligro de ser pinchado por una ralla, las cuales también acuden al festín.


La gata ha tomado posesión de la casa y acabara comiendo whiskas.

Al volver a conectar mi computadora veo varios mensajes. Uno me ha hecho muy feliz. Espero no equivocarme.

Continuaré.

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Cuándo se acaba una etapa de tu vida, cierra capítulos

Mirando al pasado de Maritza Bernal

Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida. Sí insistes en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto.
Cerrando círculos, o cerrando puertas, o cerrando capítulos, como quieras llamarlo. Lo importante es poder cerrarlos, y dejar ir momentos de la vida que van clausurandose.
No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué.
Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltarlo, hay que desprenderse.
¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Por eso, a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa, romper papeles, tirar documentos, y vender o regalar libros.
Hay que dejar ir, hay que dar vuelta a la hoja, hay que vivir sólo lo que tenemos en el presente.
El pasado ya pasó. No esperes que te lo devuelvan.
Suelta el resentimiento, lo único que consigue es dañarte mentalmente, envenenarte y amargarte.
La vida está para adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando "puertas abiertas", por si acaso, nunca podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con satisfacción.
¿Noviazgos o amistades que no clausuran?, ¿Posibilidades de regresar? (¿a qué?), ¿Necesidad de aclaraciones?, ¿Palabras que no se dijeron?, ¿Silencios que lo invadieron? Si puedes enfrentarlos ya y ahora, hazlo, si no, déjalos ir, cierra capítulos. Dite a ti mismo que no, que no vuelven. Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio.
Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año. Por lo tanto, no hay nada a qué volver. Cierra la puerta, da vuelta a la hoja, cierra el círculo. Ni tú serás el mismo, ni el entorno al que regresas será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático. Es salud mental, amor por ti mismo, desprender lo que ya no está en tu vida.
Recuerda que nada ni nadie es indispensable. Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo. Nada es vital para vivir porque cuando tú viniste a este mundo, llegaste sin ese adhesivo. Por lo tanto, es costumbre vivir pegado a él, y es un trabajo personal aprender a vivir sin él, sin el adhesivo humano o físico que hoy te duele dejar ir.
Es un proceso de ap¡El pasado ya pa´sórender a desprenderse y, humanamente se puede lograr, porque te repito: nada ni nadie nos es indispensable. Sólo es costumbre, apego, necesidad. Pero cierra, clausura, limpia, tira, oxigena, despréndete, sacúdete, suéltate.
¡El pasado ya pasó!.
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